domingo, 26 de agosto de 2012

Tallarines con verduras

Ayer comí tallarines de espinacas con verduras (cebolla, brócoli, zanahoria, calabacín y berengena). Cometí el "error" de poner un poco de vino tinto al sofrito de verduras y el calabacín se tiñó de rosa por lo que tenían un aspecto un poco extraño, aunque sabrosos de gusto. No pude resistirme a la cucharada de queso rallado. De postre: dos ciruelas.
Por la noche cené en la playa: dos rebanadas de pan con tomate y queso, algunos cacahuetes (ains!) y sandía. Para bajar los cacahuetes caminé cuatro kilómetros a buen paso. Estuve dos horas sentadas viendo una película al aire libre y después volví a andar el mismo recorrido para recoger el coche.
Estoy teniendo algunos problemas para contestar los comentarios -no sé qué le pasa a blogger- así que, Amelia, te respondo a tu comentario de ayer: no, normalmente no meriendo. Hago un buen desayuno, sí, como ya expliqué en otra entrada. Y tal vez, alguna tarde, una fruta, pero normalmente sólo hago 3 comidas al día. Cuando trabajo es bastante imposible.
Como os digo ahora mismo, escribiendo todos los días, estoy intentando hacer una especie de diario para poder presentárselo a la doctora y, al mismo tiempo ir identificando mis problemas. Yo díria que son los siguientes: 
1. Falta de ejercicio
2. Bebo poca agua
3. Como deprisa
4. Como demasiado hidrato y poca proteína
5. Algo le pasa a mi sistema metabólico, lo tengo como dormido.
Para mí el éxito, por ahora, consiste en mantenerme sin comer dulce y, lo más asombroso, llevarlo bien :)
Seguimos...

3 comentarios:

  1. Déu n'hi dó (que no sé traducirlo, más o menos "caramba").

    1. Falta de ejercicio
    2. Bebo poca agua
    3. Como deprisa
    4. Como demasiado hidrato y poca proteína
    5. Algo le pasa a mi sistema metabólico, lo tengo como dormido.


    Si lo tienes tan claro, ya sabes por dónde empezar. Bueno, primero por ir al médico, pero lo del ejercicio es vital, lo del agua ayuda un montón y cuanta más bebes, menos líquido retienes (el cuerpo sabe que no necesita acumular). Comer deprisa no deja tiempo al cerebro para saber que el estómago se ha llenado. Es cierto que comes mucho hidrato, y la proteína harta más de lo que creemos.

    Lo del sistema metabólico dormido... cuando fui a Natur House me quitaron algunas cosas (los hidratos) durante un par de semanas, sólo para sorprender al cuerpo y que reaccionara activándose. Luego ya volví a tomar hidratos, que en el fondo, están en la parte baja de la pirámide alimenticia, o sea, que hay que comerlos.

    Espero que esos 300 gr no te pongan de demasiado mal humor. A mí también me ha pasado: esta semana he subido cien gramos (he pensado "mira, los que le sobran a Matrioska").

    En fin... habrá que tomarlo con humor o joderse, y yo prefiero lo primero, ja ja ja.

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    1. Siempre con humor, Amelia, que demasiadas tristezas hay ya!

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